Los ladrillos más pequeñitos de la materia

Paseando alguna vez por la playa habrás mirado de cerca la arena. Te habrás dado cuenta que está formada por granos muy pequeños. Algunos son blancos, otros negros, otros transparentes y de otros tantos colores distintos.
La arena de la playa está formada por partículas, los átomos, muy pequeñas, como todo lo que ocupa un lugar en este mundo.
Cada uno de esos granos está formado por millones de millones de partes o partículas muchísimo más pequeñas llamadas átomos.
Los átomos son como los ladrillos con los que construyen las casas; pero con ellos construyes todo lo que puedes ver: piedras, montañas, ríos, tus mascotas, el agua, el aire, la tierra, etc.......
En cada una de esas cosas hay átomos de diferente tipo y están unidos entre si en forma diferente.
Inclusive tu mismo estás hecho de millones de millones de átomos que se mantienen unidos entre si.
Los átomos son tan pequeños que no los puedes ver, pero ocupan un espacio y tienen un peso. Los átomos son pequeños pedazos de materia.
Cualquier cosa que tenga peso, y ocupe un espacio es materia.
A su vez, el átomo está formado por otras partes o partículas mas chicas aún. Imagínate al átomo como la Tierra alrededor de la que giran los satélites.
Tienen en el centro un núcleo alrededor del que giran a gran velocidad otras partículas llamadas electrones. A su vez, el núcleo está formado por otras partículas: Los protones y los neutrones.